Esta novela habla de un joven llamado Dorian Gray, quien tiene una belleza sorprendente y no desea que desparezca. Este muchacho es egocéntrico, egoísta; sólo le importa su belleza y él mismo.
El pintor Basil Hallward hizo un retrato al tamaño natural de Dorian Gray. Lord Henry, el amigo de Basil, dijo que: "Lo único que vale la pena en la vida es la belleza, y la satisfacción de los sentidos". Yo no estoy de acuerdo, creo que la belleza interior es mejor que la belleza física, porque uno no es solo una imagen bonita, sino una persona que tiene sentimientos. Es decir, es importante valorizar más su interior que su contextura f'ísica. Todo lo contrario a lo que vemos en Dorian Gray. "Cuando su juventud pase, su belleza pasara con ella y descubrirá que se acabaron los triunfos ¡Viva esa vida grandiosa que hay en usted!, porque es muy breve el espacio de vida que le queda".
Creo que estos comentarios de Henry llevan a Dorian a que sea más egocéntrico de lo que en realidad es, "¡Pensar que envejeceré y me pondré horrible, y que este retrato permanecerá siempre joven! ¡Si fuera yo el que permaneciera siempre joven y el retrato envejeciera! ¡Lo daría todo! ¡Daria hasta mi alma!".
El egocentrismo no es solo amarse así mismo, también tiene una parte egoista, porque no se respeta las desiciones u opiniones de otros, solo las suyas, en otras palabras, el argumento de los demás no importa y solo lo que piensa él esta bien. Yo creo que a Dorian lo consumió el egocentrismo, y no se supo controlar.
Pienso en la gente como Dorian, y me pregunto ¿Está mal envejecer?...No, por supuesto que no, es parte de la vida, debemos pasar por ello porque es una etapa más. No es tan terrible, es un proceso de crecimiento para disfrutar, compartir, escuchar, ayudar, ya que eso es la satisfacción de vivir. No sean egocéntricos, ni egoístas...Cuando vean a un Dorian traten de hacerle entender que la belleza física no es lo importante.
Rocío Da Silva - ARGENTINA
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